Ilustraciones poetizadas de Irune Zarandona

Poemas

Qué alegría más grande me llevé ayer cuando recibí un correo de mi amiga Irune enviándome nada más y nada menos que una ilustración poetizada; sí, eso mismo he dicho, una ilustración poetizada. Parece extraño porque estamos más acostumbrados a justo lo contrario, a ver por ejemplo, un poema ilustrado, ¿a que así no suena tan raro? :)

Pues lo que ha hecho Irune ha sido coger ilustraciones de uno de mis diarios y ponerles palabras. Y es que es bonito poner imagen a un texto, pero también lo es poner palabras a una imagen, y más aún si se hace de la manera en que ella lo escribe.

Pero ya iréis conociendo mejor a Irune Zarandona y su maravillosa forma de escribir poesía, de percibir el mundo y de entender las imágenes, porque creo que en este blog va a dar mucho que hablar, o que rimar o que poetizar :)

Dejo aquí para que leáis el poema que me envió ayer, dedicado a una servidora (¡toma ya!), y otro que me ha mandado hoy. Qué… ¿son o no son una maravilla? Pasen y lean:

 

La columna de Pe-lolalla

Últimamente, Pe-lolalla no habla, sólo calla.
A veces, cierra los ojos y dentro, algo estalla.
Pe-lolalla calla, calla…
Su cuerpo ha empezado a desaparecer,
poco a poco,
lánguido y lento bajo la piel.
Sus ropas caen como pájaros estrellados,
sus pies apenas pueden sostener su frágil desnudez .
Pe-lolalla calla, sólo calla…
Hasta hace no mucho tiempo,
escondía en sus bolsillos las piedras de una infancia solitaria .
Un día, empezó a llover y llovió tanto,
que todo se volvió barro y llanto.
Sus pies blandos perdieron la fuerza junto a las piedras
y una a una fueron cayendo, sin peso, sin esperanza.
Pe-lolalla calla, siempre calla…
Desde entonces,
su larga melena ha empezado a crecer descontrolada,
descendiendo lentamente hacia el suelo
en una enorme columna de agua.
Pe-lolalla ha abierto de nuevo sus ojos
y nos mira mientras calla,
y algo dentro de nosotros, sin saber por qué… estalla.

 

Cabeza Burbuja

Cabeza burbuja está a punto de estallar:
sus ojos se agrandan, su nariz se ensancha, su boca se estira…
y mientras nos mira, su mal humor nos hace callar.
Cabeza burbuja perdió las manos, los pies y el tronco…
¡ lo perdió todo !
junto a una gota de agua jabonosa y jugosa que no dejaba de jugar.
Cabeza burbuja no quería flotar,
elevarse, perder la fuerza de la gravedad.
Deseaba ser raíz, piedra, volcán… para no dejar de gritar.
Cabeza burbuja tiene apenas unos segundos para desear
tus ojos, tus manos, tus pies
antes de explotar para desaparecer
de todo este mundo irreal.

Irune Zarandona

 

¡Muchas gracias Irune!